Toda mala situación que podamos evitar siempre es buena, por ello la vacunación es el mejor acto de amor y responsabilidad hacia ese amigo incondicional, además de cuidar la salud de toda la familia.
Desde que llega a casa el pequeño cachorro, perro o gato, de la mano a la desparasitación, debemos iniciar la primovacunación, que no es más que el protocolo inicial de vacunas que recibe por primera vez ese pequeño que hemos decidido cuidar, hacerlo bien, asegura una vida más sana y longeva.
Las vacunas son muchas, unas obligatorias, otras imprescindibles, y pocas más necesarias, pero poco frecuentes; cada protocolo a de adecuarse a la especia, raza, edad y entorno en el que se desarrollen nuestros peludos amigos. ¡PREGUNTA A UN EXPERTO!
